El Patriarca Ecuménico Bartolomé participó en la X edición de la World Policy Conference en Marrakech (Marruecos) del 3 al 5 de noviembre de 2017. Es de notar que se trata del único líder religioso mundial en ser invitado a hablar en tan importante acto. La World Policy Conference (WPC), impulsada por el Institut Français de Relations Internationales (IFRI) a finales de 2007, es el primer intento de realizar una evaluación sistemática de la organización de la gobernanza mundial que respondería a las realidades del siglo XXI. Reúne a personalidades mundiales de alto nivel, investigadores y líderes de opinión.
Las principales ideas manejadas por la WPC son que el mundo, en sus dimensiones política y económica, es un sistema interdependiente que necesita una gobernanza coherente; que los Estados, como unidades políticas principales, tienen una responsabilidad colectiva de modelar este “sistema global”; que la globalización ha contribuido a la proliferación de actores no estatales a nivel internacional (empresas, operadores de mercado, ONG’s, etc.); que la buena gobernanza requiere una estrecha colaboración entre estos actores y los Estados, estructurada según sus campos de actividad; que la buena gobernanza también requiere que el peso de los Estados más grandes no sofoque a los más pequeños, cuyas voces tienen que ser escuchadas; y que en este comienzo del siglo XXI el mundo está sujeto a una cantidad de cambios sin precedentes y a una velocidad y complejidad también inauditas. Las herramientas de gobernanza deben por tanto ser capaces de adaptación en circunstancias rápidamente cambiantes y a menudo impredecibles.
En su alocución, el Patriarca Ecuménico subrayó que “la legitimidad de las religiones hoy depende en su clara actitud hacia la protección de la libertad y la dignidad humanas como principios fundacionales en el establecimiento de la paz. Ningún desafío, sea personal o internacional, encontrará solución en la soledad y el aislamiento. Nos necesitamos unos a otros porque somos seres relacionases, seres de comunión que, a medida que se acercan unos a otros, se convierten en verdaderos actores de paz”. “La verdadera paz no se consigue por la fuerza de las armas, sino solo mediante el amor que no busca su propio interés”, dijo el Patriarca.
Fuente: www.ecupatria.org
Traducción propia del inglés
